COMUNICADO DE PRENSA
No. 222 / NOVIEMBRE 21, 2009
No. 222 / NOVIEMBRE 21, 2009
“I’M A CYBORG, BUT THAT’S OK”, DE PARK CHAN WOOK, CIERRA EL CICLO
- COMEDIA ROMÁNTICA ORIENTAL, OCCIDENTALMENTE BIZARRA
- MUY DIFERENTE A LA “TRILOGÍA DE LA VENGANZA
COZUMEL, Q. ROO.- La Fundación de Parques y Museos de Cozumel, Quintana Roo (FPMCQROO), en coordinación con “Hazme Sentir Collective”, presentará “I’m a Cyborg, but that’s OK” del ciclo del Cine de Autor “Corea de Chan Park Wook”; película con la que culmina el ciclo del Cine de Autor de Noviembre. Lo anterior, el próximo martes 24, en el auditorio “Lic. Pedro Joaquín Coldwell” del Museo de la Isla, a las 19:00 horas. La entrada será libre.
“I’m a Cyborg, but that’s OK” es una obra sobre la soledad, la necesidad de un ser querido y de encontrar lugar en este mundo.
El argumento se sitúa en la joven Young-Goon (Su-Jeong Lim), quien está convencida de ser un cyborg de combate. Un día, tras cortarse las venas, meterse un cable y conectarse a la corriente para recargarse, la ingresan en un hospital psiquiátrico. La protagonista se niega a comer desde que encerraron a su abuela y teme que ingiriendo alimentos, puede perder su capacidad destructora.
Dentro del hospital habitan una serie de extraños personajes, pero será Park Il-soon (Rain) – un ladrón tan habilidoso que puede robar estados mentales, destrezas y emociones, y que además se oculta tras variadas máscaras – el que más se relacionará con Young-Goon.
Ello conlleva al hecho de que la joven le pida a su nuevo amigo que use sus “habilidades” para robarle su compasión, con el propósito de matar a todos los doctores y residentes del centro, ya que ese sentimiento le impide hacerlo. Park Il-soon no sólo hará lo que le solicitan, sino también logrará que su amiga deje su dieta de baterías y su infinita tristeza.
Visto así, el argumento puede asustar a más de uno, teniendo en cuenta que se trata de una película asiática; sin embargo, desde otra perspectiva, “I’m a Cyborg, but that’s OK” es una comedia romántica en inicio, llena de ternura y escenas – aunque bizarras en nuestra cultura occidental – con una profunda carga emotiva, llena de simbolismos, en un ejercicio que demuestra que Park Chan-Wook está capacitado para hacer el cine que mejor considere.
Pero la cinta no está exenta de violencia, pues el director aprovecha la locura de Young-Goon, ese supuesto cyborg asesino destinado a desatar el fin del mundo y aniquilar a la humanidad, para presentar diversas masacres a ritmo de vals.
Una de las mejores películas que el cine asiático contemporáneo hayan dado hasta hoy.
“I’m a Cyborg, but that’s OK” es una obra sobre la soledad, la necesidad de un ser querido y de encontrar lugar en este mundo.
El argumento se sitúa en la joven Young-Goon (Su-Jeong Lim), quien está convencida de ser un cyborg de combate. Un día, tras cortarse las venas, meterse un cable y conectarse a la corriente para recargarse, la ingresan en un hospital psiquiátrico. La protagonista se niega a comer desde que encerraron a su abuela y teme que ingiriendo alimentos, puede perder su capacidad destructora.
Dentro del hospital habitan una serie de extraños personajes, pero será Park Il-soon (Rain) – un ladrón tan habilidoso que puede robar estados mentales, destrezas y emociones, y que además se oculta tras variadas máscaras – el que más se relacionará con Young-Goon.
Ello conlleva al hecho de que la joven le pida a su nuevo amigo que use sus “habilidades” para robarle su compasión, con el propósito de matar a todos los doctores y residentes del centro, ya que ese sentimiento le impide hacerlo. Park Il-soon no sólo hará lo que le solicitan, sino también logrará que su amiga deje su dieta de baterías y su infinita tristeza.
Visto así, el argumento puede asustar a más de uno, teniendo en cuenta que se trata de una película asiática; sin embargo, desde otra perspectiva, “I’m a Cyborg, but that’s OK” es una comedia romántica en inicio, llena de ternura y escenas – aunque bizarras en nuestra cultura occidental – con una profunda carga emotiva, llena de simbolismos, en un ejercicio que demuestra que Park Chan-Wook está capacitado para hacer el cine que mejor considere.
Pero la cinta no está exenta de violencia, pues el director aprovecha la locura de Young-Goon, ese supuesto cyborg asesino destinado a desatar el fin del mundo y aniquilar a la humanidad, para presentar diversas masacres a ritmo de vals.
Una de las mejores películas que el cine asiático contemporáneo hayan dado hasta hoy.
No hay comentarios:
Publicar un comentario